Los altos cargos del socialismo andaluz, con Griñán a la cabeza, han defendido siempre la pulcritud en el manejo de los fondos públicos para el fomento y el mantenimiento del empleo en Andalucía. Ajenos a los escándalos notables en el desvío de fondos que finalmente han ido a parar al bolsillo de personajes bien relacionados con la Junta de Andalucía, los socialistas andaluces blasonan de una gestión impecable que, a su juicio, ha permitido la creación de miles de puestos de trabajo.
Pero no se trata sólo de declaraciones públicas de los altos cargos de la Junta, sino que también en el terreno institucional este orgullo por una gestión bien hecha tiene su adecuado reflejo. Sólo así cabe entender la convocatoria de los III Premios a las Buenas Prácticas en la gestión de las políticas de empleo en Andalucía, publicada este miércoles en el boletín oficial de la región.
Se trata de un certamen con el que se pretende premiar aquellas "acciones que favorezcan la mejora continua y la innovación en el Sistema de Orientación Profesional Andalucía Orienta", desde el convencimiento de que las acciones "innovadoras" pueden incrementar la calidad del servicio prestado, haciendo "avanzar y mejorar los recursos puestos a disposición de las personas desempleadas".
Uno de los criterios de valoración para otorgar estos premios será el "Dinamismo y flexibilidad de la buena práctica y su adaptación a la demanda coyuntural del mercado laboral y a las necesidades de las personas demandantes".
Se concederán seis premios en total, consistentes en un diploma y un placa conmemorativa, en el bien entendido que ninguno de estos galardones llevará aparejada gratificación económica alguna.