La subasta entre comercializadores de último recurso para fijar el término de la energía dentro de la tarifa de luz, cuyo peso ronda el 50% en el recibo, se ha cerrado con bajadas del 7,1%, indicaron a Europa Press en fuentes del sector.
Este descenso da margen al Gobierno para aplicar en abril un incremento en parecida proporción de la otra parte del recibo, la correspondiente a los costes regulados de la actividad eléctrica, o peajes, sin necesidad de subir la TUR.
En todo caso, el Ejecutivo ha advertido de que el recibo subirá previsiblemente en abril para recoger las recientes sentencias del Tribunal Supremo que obligan a refacturar los consumos de cerca de 22 millones de clientes desde octubre del año pasado para recoger el coste real de la actividad eléctrica.
En todo caso, el ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, ha anunciado que no todo el peso de la refacturación caerá sobre el consumidor. Para ello, el Gobierno trabaja en una reforma energética que permita rebajar los costes del sistema eléctrico.
En el escenario actual, las eléctricas calculan que, para evitar que en 2012 el déficit de tarifa supere el tope legal de 1.500 millones de euros, es necesario subir un 30% los peajes de luz, que recogen los costes regulados del recibo, lo que redundaría en un alza del 15% en el precio final de la electricidad.
En el caso hipotético de que el Gobierno trasladara ahora estas cifras que ofrecen las eléctricas y no aplicase medidas adicionales, el recibo de la luz debería subir en abril más de un 11%. En todo caso, tanto desde el Ejecutivo como desde la propia Comisión Nacional de la Energía (CNE) se considera que estos incrementos serían excesivos para el consumidor. Además, el secretario de Estado de Energía, Fernando Marti Scharfhausen, advirtió el viernes pasado de que es el Gobierno el encargado de dirigir la política energética y advirtió a las eléctricas de que la solución del problema no recaerá solo sobre el consumidor.
Al margen de posibles recortes en los costes que se reconocen a las empresas, otra de las opciones para mitigar una fuerte subida de la luz sería ampliar el máximo legal de 1.500 millones de euros de deuda eléctrica para el ejercicio, como ya hizo anteriormente el departamento dirigido por Miguel Sebastián.
Según lo previsto
La bajada en la subasta de este miércoles cumple con la tendencia de los últimos años, en los que el precio de la electricidad ha sido estacionalmente más bajo en la primera parte del ejercicio. El año pasado, cuando ya se había subido un 9,8% el recibo en enero, la subasta de marzo cerró con caídas del 9,4%, lo que permitió al Gobierno subir un 10,8% los peajes y forzar una congelación del recibo. Posteriormente, Industria subió el recibo en julio, un 1,5%, y aplicó congelaciones en octubre y enero, ambas anuladas por el Supremo.