El negocio del dinero, que no del riesgo, es demasiado delicado como para dejarlo en manos de bancos privados. El del riesgo de verdad, sí, pero sin que tengamos que pagarlo o rescatarlo los ciudadanos si no les va bien a los banqueros. Pero si se hiciera así, muchos bancos quebrarían. Viven del dinero ajeno y con una regulación de cuasi-monopolio, con o sin ayudas publicas. Lo de los sueldos, aunque no sean bancos que reciban ayudas es de traca y debiera estar prohibido, aunque surgirían corruptelas.
Para que se sepa. La banca publica que existía en España, en época de Franco y anterior, se creó porque la banca privada sencillamente no entraba en los riesgos de los sectores en los que operaba la publica por diversos motivos, entre otros, su baja rentabilidad o alto riesgo. Cuando resultó rentable -o se liberalizaron los sectores- la privada entró, dejó a la pública con perdidas y la absorbió, a bajo precio claro.
Bancos y cajas, sobran muchos, sobre todo los que operan con simples margenes de intermediación, sin riesgo alguno de verdad.
Solo quedarán dos semanas de bancos o es que hay alguna nueva acepción que aún no está en el diccionario
15?...me parecen muchos para más allá del 2013...
ancarnu, que bien ibas en tu descripción hasta que soltaste la coletilla típica de panfleto de"fascista"...
Por si no lo sabias, el fascismo era partidario de una banca pública estatal, aquí en España tuvimos el banco de crédito hipotecario e industrial por ejemplo en la época d eFranco(aunque proviene de los años 20 su creación)
Para monopolio similar al globalizador el comunismo, el monopolio del estado en todos los campos.
Nuevas necesidades del mercado:
tomar el dinero al 0 % como máximo y prestarlo al 10 % como mínimo.
Oligopolio quasifascista.Y sin quasi.
Junger:
Fascista lo digo pensando en las grandes empresas privadas alemanas en tiempos de Hitler con quien se entendían perfectamente.
Franco no era un fascista , Franco era un verdadero patriota con un profundo deseo de sacar adelante al pueblo español y, aunque con él algunos empresarios medraron inadecuadamente, sabían donde estaba el límite pues el general no se andaba con chiquitas ante las guarradas. Recordemos el nombramiento de Ullastres (creo que era este el ministro en cuestión): saque España adelante yo no me voy a inmiscuir en nada pues no entiendo de economía.