Poco a poco el Ejecutivo de Mariano Rajoy va configurando su listado de altos cargos en la administración. Lo último ha sido la Oficina Nacional de Investigación del Fraude –ONIF- donde ha cesado a la cúpula directiva heredada del Gobierno Zapatero y ha colocado como director a Santiago Méndez, y como su adjunta a Pilar Valiente.
Pilar Valiente fue la presidenta de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) desde el 6 de octubre de 2000 hasta el 21 de septiembre de 2001, cuando tuvo que dimitir por el caso "Gescartera". El mismo caso que provocó también la dimisión del secretario de Estado de Hacienda, Enrique Giménez Reyna, cuando Montoro ocupaba el mismo cargo con Aznar que tiene hoy con Rajoy.
Esta oficina es un órgano dependiente de la Agencia Tributaria y del Ministerio de Hacienda que ha investigado casos como 'Gürtel' o el más reciente que afecta a Iñaki Urdangarín. Valiente ejercía hasta ahora de inspectora de la ONIF, a la que se incorporó tras su salida de la CNMV.
Su relación con Gescartera
El 19 de septiembre de 2001, Valiente presentaba su dimisión al frente de la CNMV, para "librar", decía, a dicho organismo regulador del acoso por el caso Gescartera. Un día antes, se había hecho público un dietario en el que quedaba reflejada cierta relación entre Pilar Valiente y los gestores de Gescartera.
En 2004, Valiente volvía a trabajar en la Agencia Tributaria bajo las órdenes del inspector Jesús Bermejo, su antiguo jefe. Allí, en la ONIF, inicia su actividad profesional junto a otros inspectores que habían colaborado en las investigaciones de Gescartera.