Esperanza Aguirre ha hecho estas consideraciones en rueda de prensa tras el Comité de Dirección del PP de Madrid, en una jornada en que hay convocadas varias protestas en la ciudad por desahucios, en apoyo a los estudiantes valencianos o contra los recortes del Gobierno.
"A mí me escandalizó escuchar al secretario general de UGT decir que había que conseguir la helenización de España y me sigue escandalizando", ha afirmado la presidenta, quien ha añadido que le "escandaliza aún más" que el PSOE, "responsable en una medida muy alta de lo que está ocurriendo" en el país y de la crisis económica, "se una a estas protestas".
"¿Qué quieren conseguir con mucho jaleo en la calle? , ¿qué?, ¿que España se convierta en Grecia? pues a mí me parece un disparate", ha aseverado Aguirre que está a favor de "evitar justamente eso" para "volver a ser un país sólido, solvente que crea confianza y que genera empleo, todo lo contrario -ha dicho- de lo que pretenden los de la helenización".
Ha advertido de que "todo aquel que incumpla la ley tiene que tener consecuencias" y que los delegados del Gobierno actuales lo entiende así, a diferencia de lo que ocurría bajo el mandato socialista y cuando Alfredo Pérez Rubalcaba era ministro de Interior.
"Los delegados del Gobierno están para cumplir la ley. Ellos primero y para hacerla cumplir", ha advertido la presidenta, y ha recordado que las amenazas contra ella o contra cualquier otra persona están castigadas en el código penal "y deben ser perseguidas".
Precisamente, ha puesto de manifiesto que hace pocos días, durante una "algarada ilegal" callejera, alguien tiró "una bola de acero" contra el cristal de su despacho de la calle Génova y lo rompió.