Mercadona dará este año el salto al exterior con la compra de una cadena pequeña en un país del entorno, que podría ser Italia, un hecho que se producirá una vez que la cadena de supermercados presidida por Juan Roig ha cubierto prácticamente el mercado nacional.
"Mercadona tiene previsto salir al exterior este año a través de la compra de una pequeña cadena en un país de su entorno y no por crecimiento orgánico", señalaron a Europa Press en fuentes de la compañía, que precisaron, no obstante, que no hay ninguna decisión tomada al respecto.
Según publica Actualidad Económica en su último número, el país elegido es Italia, donde el grupo valenciano está negociando comprar una pequeña cadena del Norte del país, de entre 30 y 40 tiendas, que le permitiría crecer poco a poco. El acuerdo está ultimándose y podría sellarse y darse a conocer en marzo.
En el reportaje, Roig afirma que la compañía, la única de los grandes distribuidores que ha elevado su cuota de mercado durante la crisis, tiene todavía un potencial de mejora del 70%, porque su techo en España "no es cuestión del número de aperturas", sino de todo lo que le queda por aprender y mejorar.
"El cliente es quien tiene el poder de la vida y de la muerte de la empresa y por eso lo situamos en el centro de todas las decisiones. Y cuando no es así, pasa como ocurrió en 2008, que nos amuermamos. Los clientes nos estaban abandonando y tuvimos que tomar decisiones aunque pudieran resultar impopulares y molestas. Y así lo seguimos haciendo", afirma este empresario que lleva 31 años al mando y por cuya cabeza no pasa la idea de ceder el testigo.
"Todavía soy joven, sólo tengo 62 años. De lo que estoy seguro es de que me jubilaré el día que fallezca", asegura Roig, cuya estrategia de negocio apuesta por las marcas propias y los precios bajos.
Por otro lado, el presidente de Mercadona afirma que la situación económica en España no es buena y considera que la principal causa de la crisis es el "derroche" de todos en años de bonanza. "No podemos gastar más de lo que ingresamos, porque el dinero del Estado sale del trabajo de todos", señala.
Roig explica que para enderezar la situación sólo hay dos caminos: mejorar la productividad o bajar el nivel de vida. "Yo prefiero lo primero", dice.
Además de productividad, otro ingrediente básico de la receta anticrisis del presidente de Mercadona es la cultura del mérito. "Tenemos que hablar más de nuestras obligaciones que de nuestros derechos. Y debemos tener una sociedad donde la pasión por el trabajo bien hecho y por el esfuerzo esté valorada, reconocida y recompensada", subraya.