La UE podría adoptar medidas sancionadoras contra el Gobierno de Mariano Rajoy el próximo mayo si, finalmente, se confirma que España superó el objetivo de déficit público, fijado en el 6% del PIB, y por retrasar las medidas de austeridad presupuestaria hasta la celebración de las elecciones andaluzas del 25 de marzo.
Sin embargo, la Comisión Europea aún no ha adoptado ninguna decisión definitiva al respecto, ya que considera que el Gobierno podría haber exagerado el déficit de 2011 para que las cifras arrojen un mejor resultado este año, según tres altos funcionarios de la UE consultados por la agencia Reuters.
Bruselas pone en duda la desviación fiscal del 8% del PIB denunciada por Rajoy tras su llegada al poder, frente al 6% anunciado por el anterior Ejecutivo. La estimación más reciente de la Comisión sitúa el déficit español en el 6,6% del PIB. Aunque reconoce que el gasto de la Seguridad Social y las prestaciones por desempleo superó las previsiones iniciales, estima que el Gobierno podría haber inflado la cifra de déficit.
"Estamos esperando las cifras oficiales, pero no confiamos en los cálculos actuales", según una de las fuentes. Otro funcionario dijo que la Comisión espera que Eurostat, la agencia estadística de la UE, anuncie un déficit inferior al 8% tras actualizar sus previsiones el próximo 23 de febrero.
Además, en caso de producirse una desviación respecto al objetivo de déficit del 6% -aunque sea inferior a la anunciada por Rajoy-, estas mismas fuentes aseguran que el comisario europeo de Asuntos Económicos y Monetarios, Olli Rehn, tomaría medidas, recomendando la aplicación de sanciones contra Madrid. "No es que queramos", pero si existe desviación, algo "casi inevitable", entonces Bruselas sancionaría a España, advierten. Dicha multa, del 0,1% del PIB (unos 1.000 millones de euros), sería, además, independiente de la sanción que podría imponer a España por registrar desequilibrios económicos excesivos (de hasta otros 1.000 millones).
España se ha visto sometida a lo que se conoce como procedimiento de déficit excesivo desde abril de 2009 por el incumplimiento del límite de déficit del 3% del PIB, pero de momento la posibilidad de multas está congelada porque la UE ha ido considerando que el anterior Gobierno adoptaba las medidas correctivas exigidas. Veintitrés de los 27 miembros de la UE están bajo este mismo procedimiento, pero ahora Bruselas podría sancionar por primera vez a España por no reducir el déficit.
Retraso en las medidas de austeridad
Por otro lado, los técnicos de Bruselas acusan al Gobierno popular de retrasar en exceso las medidas de austeridad presupuestaria para poder abordar con la suficiente rapidez el deterioro de las finanzas públicas que se prevé para 2012, según estos tres altos funcionarios. En concreto, no ven con buenos ojos que Rajoy retrase la presentación de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2012 hasta la celebración de las elecciones andaluzas del próximo 25 de marzo. "Es un riesgo", alertan.
Rajoy y su ministro de Economía, Luis de Guindos, han argumentado que necesitan conocer las previsiones de la Comisión antes de redactar las cuentas públicas de 2012. Sin embargo, estas fuentes señalan que la razón real estriba en que Rajoy preferiría retrasar las medidas de austeridad hasta después de las elecciones andaluzas para no perjudicar las aspiraciones del popular Javier Arenas. "Este retraso es una lástima. El nuevo presupuesto será enviado sólo en abril, y eso es realmente lamentable. No creo que se hayan dado cuenta de la gravedad de la situación", añade uno de los funcionarios.
El Gobierno ha traslado a Bruselas que iniciará la ejecución de su nuevo presupuesto tan pronto como sea posible, pero los funcionarios creen que su aplicación podría retrasarse hasta junio, demasiado tarde para cambiar el rumbo de la deriva fiscal en 2012.
Además, si bien el Gobierno de Rajoy mantiene por ahora su objetivo de reducir el déficit hasta el 4,4% del PIB este año, las malas perspectivas de crecimiento lo hacen muy improbable. Por ello, estas mismas fuentes creen que Rajoy ya ha convencido a Alemania y al Fondo Monetario Internacional (FMI) para relajar estas exigencias iniciales. El pasado noviembre, la Comisión preveía que España registraría un déficit del 6,6% en 2011 y del 5,9% en 2012, partiendo de que el PIB crecería un 0,7% cada año. Sin embargo, la recesión ha desbaratado esta estimación inicial.