El Fondo Monetario Internacional (FMI) sugiere que el Banco Central Europeo (BCE) y otros acreedores públicos de la deuda helena deben asumir pérdidas en sus carteras de bonos griegos para ayudar a situar la deuda del país en una senda sostenible en caso de que el plan acordado con el sector privado no sea suficiente.
Según recoge la prensa francesa, la directora gerente del FMI, Christine Lagarde, ha asegurado en un encuentro con los medios en París que si el nivel de la deuda griega no es lo suficientemente renegociado con los acreedores privados, los acreedores públicos "deberían también participar en el esfuerzo financiero".
El diario británico Financial Times publica este miércoles que el BCE se ha resistido ferozmente a la presión del FMI, que quiere que la institución presidida por Mario Draghi acepte algún tipo de reducción del valor de su cartera de bonos griegos, que se estima es de 40.000 millones de euros.
"El equilibrio entre la participación de los sectores público y privado es una cuestión que preocupa a los prestatarios griegos y a los socios en el seno de la zona euro", reconoció Lagarde cuando fue preguntado por los medios franceses sobre la información publicada por el diario británico.
Aún así, la exministra francesa de Finanzas recordó que el FMI no es más que un observador en el mercado de las negociaciones entre el sector privado y las autoridades griegas.
Por otro lado, afirmó durante una entrevista concedida a la radio francesa Europe 1 que una combinación del Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF) y el Mecanismo Europeo de Rescate (Mede) sería una "señal muy fuerte de confianza" dentro la zona euro, que necesita un "cortafuegos potente" para evitar que la crisis griega se contagie a Italia y España.
Mientras tanto, el BCE mantiene su firme oposición a cualquier reestructuración de sus tenencias de bonos griegos según informa Bloomberg.