El presidente francés, Nicolas Sarkozy, y la canciller federal alemana, Angela Merkel, han detallado en una carta conjunta difundida este miércoles en París y dirigida al presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, sus propuestas de reforma de la Unión Europea.
Sarkozy y Merkel confirman en la carta que las medidas adelantadas el pasado lunes tienen como meta "reforzar la arquitectura" de la Unión Económica y Monetaria y tienen que aplicarse con "absoluta urgencia" para resolver la crisis "de manera inmediata". Ambos confirman la intención de proponer que los compromisos que presentan sean asumidos por los 27 Estados de la Unión, aunque si ello no es posible indican que los países de la eurozona "tendrán que ir por delante".
Sarkozy y Merkel aseguran que las reformas que proponen se integran de manera coherente con "la arquitectura institucional de la UE" y certifican que, como anunciaron el lunes, pretenden que los líderes de la eurozona se reúnan, mientras dure la crisis, una vez al mes. No obstante, agregan que otros países firmantes de lo que denominan como "pacto por el euro plus" serán invitados a participar en los debates "en los asuntos relacionados con él", según informa Efe.
Cumbres: Para reforzar la gobernanza de la eurozona proponen que esas cumbres se celebren en condiciones normales un par de veces al año, con una presidencia permanente, y que en ellas se den las "orientaciones estratégicas para las políticas económicas y presupuestarias de la eurozona". "El impacto de nuestras políticas económicas y presupuestarias en la eurozona tiene que considerarse como una cuestión de interés común, siempre respetando la responsabilidad nacional", añaden en la carta a Van Rompuy.
Prevención: Los dos hacen un llamamiento a que se cree un "marco de prevención global que refuerce la coordinación, la vigilancia y el respeto de las reglas, así como incitaciones positivas, sobre la base de las disposiciones actuales".
Impuestos: Francia y Alemania quieren un impuesto para empresas común para Europa y un impuesto para las transacciones financieras a la vez que una convergencia de la regulación financiera y de los políticas del mercado laboral.
Regla de oro: El plan propuesto, como ya avanzaron los dos el lunes, prevé la aprobación en cada Estado de la denominada "regla de oro" y afirman que tendrá que haber una nueva disposición legal que precise "las exigencias mínimas" que se esperan de esa norma que exigirá el equilibrio de las cuentas nacionales. Y añaden que será el Tribunal de Justicia de la UE el que, a petición de la Comisión Europea o de un Estado miembro, quien tendrá la posibilidad de verificar su transposición en el marco legal nacional.
Presupuestos: Los parlamentos nacionales tendrán que "tener en cuenta las recomendaciones adoptadas a nivel europeo sobre la gestión de las políticas económicas y presupuestarias", añaden. Confirman que habrá un "procedimiento nuevo" para corregir "todo exceso por encima del 3 % del PIB" en relación al déficit y explican que, cuando la Comisión lo haya constatado, tendrá que haber "consecuencias automáticas a menos que el eurogrupo, por mayoría cualificada, decida otra cosa".
Circunstancias excepcionales: "Las circunstancias excepcionales deberán ser tomadas en cuenta", afirman Sarkozy y Merkel, quienes agregan que el Estado concernido debera conseguir que el eurogrupo apruebe un "partenariado europeo por la reforma" con las medidas presupuestarias y estructurales detalladas para ese país que le permitan "superar sus dificultades y ayudarle en sus esfuerzos".
Intervención y sanciones: Además, deberá ser posible aplicar "una serie de intervenciones de intensidad creciente sobre los derechos de ese Estado", entendidas como una "respuesta concreta" a la situación de déficit excesivo en el que incurra el país en cuestión. Y agregan que las "etapas y sanciones propuestas o recomendadas por la Comisión tendrán que ser aprobadas por el Consejo a menos que una mayoría cualificada de los Estados de la eurozona decida otra cosa".
Amenazas futuras: Sarkozy y Merkel confirman que el Mecanismo Europeo de Estabilidad Financiera (MEEF) tendrá que ser efectivo en 2012, un año antes de lo previsto, y eso para que pueda "hacer frente a las amenazas futuras para la estabilidad de la eurozona en su conjunto, incluido el riesgo de contagio a otros" miembros del grupo. Y recuerdan que el tratado del MEEF deberá ser revisado en lo que afecta a la participación del sector privado "para que quede claro que la solución requerida para Grecia fue única y excepcional.