Yorgos Papandreu se ha convertido en una cara muy popular en los últimos meses. Más en los últimos días, después de que echara un pulso a Bruselas convocando un referéndum sobre el plan de ajuste que le impone la UE. En estos últimos días, el primer ministro afronta también una profunda crisis en el seno de su ejecutivo.
Papandreu, para la mayoría, se es el último primer ministro griego, ese que ocupa portadas de periódicos a lo ancho y largo del mundo, y a quién estos días se le considera el posible destructor de la moneda única europea. Pero casi nadie conoce la historia de este político, nacido en EEUU, muy condecorado y descendiente de una gran estirpe de primeros ministros griegos.
Tiene 59 años y nació en el estado norteamericano de Minnessotta. Su padre, Andreas Papandreu fue dos veces primer ministro. Su abuelo, Yorgos, también lo fue, en tres ocasiones. Así, Yorgos Papandreu representa la tercera generación de la más célebre dinastía de primeros ministros griegos. Accedió a este cargo en octubre de 2009, aunque ya fue ministro de Educación en el Ejecutivo de su padre y en el de Kostas Simitis (ministro de Relaciones Exteriores).
Yorgos Papandreu (el actual primer ministro griego) llegó al poder en octubre de 2009 cuando el Partido Socialista heleno (PASOK), ganó las elecciones y se hace con el poder desbancando al conservador Kostas Karamanlis, hasta ese momento en el poder.
Una saga de políticos
Algunos historiadores hablan de la familia Papandreu como "la más famosa de las familias políticas de la Grecia contemporánea". Y es que Yorgos Papandréu, el actual primer ministro griego, es el descendiente de una auténtica saga de presidentes helenos.
Su abuelo, Yorgos Papandreu (I) (1888-1968) fue un abogado de Acaya de tendencias republicanas y liberal conservadoras. En el periodo de entreguerras labró su carrera política como gobernador de las islas del Egeo. Después fue diputado nacional y ministro de Educación en el primer Gobierno republicano del líder liberal Eleftherios Venizelos. En 1935 se produce el golpe de estado que reinstaura la monarquía en la persona de Jorge II y una dictadura al mando del general Ioannis Metaxas. Papandreu abandona a Venizelos y se pone al frente de su propio partido, el Democrático Socialista DSKE. Tras sufrir destierro y cárcel, asumió el Gobierno en 1944, pero un año después renunció al poder. En 1963, tras pasarse varios años en la oposición, ganó las elecciones generales y retornó al puesto de primer ministro.
Su padre, Andreas Papandreu -hijo de Yorgos (I)- fue militante de un grupúsculo marxista en 1940, cuando escapó de la dictadura de Metaxas y se instaló en EEUU, donde obtuvo la nacionalidad y comenzó una brillante carrera académica en varias universidades, entre ellas la de Minnessotta, donde nació Yorgos (el actual primer ministro griego), a quien registró con el anglófono nombre de Jeffrey. Yorgos estudió en EEUU en las mejores universidades y cuando regresó a Grecia se daba la paradoja de que hablaba mejor el inglés que el griego.
La madre, Margaret Papandreou, apellidada de soltera Chant, era una natural de Illinois, periodista y militante feminista que había conocido a su marido griego siendo alumna suya en la universidad.
Andreas decidió instalarse definitivamente en Grecia dispuesto a simultanear la vida universitaria y, por primera vez, la profesión política, como diputado por el partido de su padre, cuya ala izquierdista pasó a liderar, y ministro de su Gobierno.
En 1967 los Papandreu intentaban retornar al Gobierno por la vía electoral, pero la extrema derecha militar se anticipó a ese escenario dando un golpe de Estado que liquidó la ya herida democracia griega. Yorgos I fue puesto bajo arresto domiciliario y en noviembre de 1968 continuaba en esa situación cuando falleció por causas naturales a los 80 años de edad.
Su hijo Andreas daba clases de Economía en universidades locales y organizaba la oposición a la dictadura con su nuevo instrumento partidista, el Movimiento de Liberación Panhelénico (PAK).
En julio de 1974 cae el régimen de los coroneles y Andreas transforma el PAK en PASOK (Movimiento Socialista Panhelénico), al que dotó de ideario socialdemócrata y envolvió en retórica izquierdista y radical. Nacionalismo, euroescepticismo, antiatlantismo y una hostilidad manifiesta a EEUU, fueron sus señas de identidad.
Su hijo Yorgos se convirtió en un militante activo del PASOK, que cosechó un sonoro fracaso en las primeras elecciones de la restauración democrática, las del 17 de noviembre de 1974. Los comicios fueron ganados por Nueva Democracia (ND), la formación conservadora recién fundada por Konstantinos Karamanlis, una de las más insignes personalidades políticas del período monárquico democrático, cuando había sido tres veces primer ministro; ahora, bajo el sistema republicano, Karamanlis era de nuevo jefe del Gobierno y el máximo adversario parlamentario de Papandreu.
El 19 de octubre de 1981, el PASOK conducido Andreas Papandreu ganó las elecciones y conquistó la mayoría absoluta con el 48,1% de los votos y 172 escaños, uno de los cuales, por Acaya, fue para su hijo Yorgos.
El 2 de junio de 1985 el PASOK retuvo la mayoría absoluta pese a un sensible retroceso. Andreas, el 26 de julio, formó su segundo Gobierno y en él, Yorgos recibió un puesto de segunda fila, una subsecretaría en el Ministerio de Cultura, al cargo de los asuntos de los griegos de la diáspora, la juventud y la formación continua.
El 22 de junio de 1988 su padre le reclamó de nuevo para el Gobierno, pero esta vez le metió directamente en el Consejo de Ministros como titular de la cartera de Educación Nacional y Asuntos Religiosos.
En las elecciones del 18 de junio de 1989 vieron arrebatada la mayoría por los neodemócratas de Konstantinos Mitsotakis. Entonces, ND pactó con el Partido Comunista de Grecia (KKE) un insólito Gobierno de cuarentena socialista que entró en funciones el 2 de julio, momento en que los Papandreu quedaron apeados del poder.
En las elecciones generales del 10 de octubre de 1993, que concedieron al PASOK una holgada mayoría absoluta de 170 escaños con el 46,9% de los votos, le devolvieron triunfalmente al poder. Tres días después, Papandreu, con 74 años de edad, tomaba posesión del Ejecutivo helénico, presidido en los tres últimos años por Mitsotakis.
En el siglo XXI, ya era Yorgos Papandreu (II), nieto e hijo de primeros ministros, el jefe de la oposición. Optaba a la presidencia que llegó en 2009, cuando ganó las elecciones y todo se torció. El Partido socialista griego ganaba las elecciones en octubre y se encontraba con que los conservadores populistas que dejaban el poder, conducidos por Kostas Karamanlis, habían dejado las cuentas públicas echas unos zorros. Grecia no tenía un déficit del 4%, sino del 12,7%. Su deuda alcanza los 300.000 millones.
En cualquier caso, y antes de que se conociera el escándalo, Yorgos Papandreu II fue conocido como "el hombre que tiende puentes", o "diplomático del año", "arquitecto del acercamiento Greco-Turco", etc. Hasta llegó a tener condecoraciones como la Gran Curz de la Orden de la Estrella Polar sueca o la Gran Cruz de Isabel la Católica española. Todo por su destreza para limar las asperezas con Turquía, Macedonia y otros vecinos.
Ahora, puede convertirse el "enemigo del año" o el hombre que podría acabar con la moneda única. El pulso está echado, sólo falta ver cómo termina el duelo.