Hong Kong, el tercer mayor centro mundial de negociación de oro, se ha convertido en el primero en ofrecer la negociación de oro en yuanes, la divisa china, favoreciendo así la aspiración del gigante asiático de potenciar su moneda nacional.
La Chinese Gold & Silver Exchange Society (CGSE) de Hong Kong es un centro de negociación de lingotes de oro con cien años de historia. Este nuevo servicio, denominado "Renminbi Kilobar Gold" se dirige tanto a los inversores minoristas como a los institucionales y viene a unirse a otros que recientemente tratan de captar los crecientes depósitos en yuanes dentro del sistema bancario de Hong Kong. Y es que los depósitos denominados en yuanes en la antigua colonia británica han aumentado un 93% este año.
Según Haywood Cheung, presidente de CGSE, "hay una triple demanda para este producto denominado en yuanes", ya que los inversores "pueden disfrutar el mercado alcista en oro, la apreciación del yuan y cubrir el oro denominado el otras divisas contra el yuan".
Cheung considera que es "el momento adecuado" para lanzar este producto. "Con la depreciación del dólar y los problemas en la zona euro, los inversores se percatan de que quieren otras divisas que sean más seguras, como el renminbi. El oro puede ser una forma para que la gente apueste por el yuan, incluso si todavía no es plenamente convertible".
En mayo, la bolsa de Hong Kong había empezado a negociar con futuros sobre oro denominados en dólares. Y la CGSE se está planteando la posibilidad de lanzar un producto similar al Renminbi Kilobar Gold para la plata. De momento, CGSE ha impuesto un techo diario de 300 kilogramos de entrega física de oro denominado en yuanes para evitar quedarse sin reservas de oro.
El cable de Wikileaks
En el último lustro, China prácticamente ha duplicado sus reservas de oro, pasando de 600 toneladas en 2007 a las actuales 1161,1. Según Wikileaks, se trata de una política diseñada específicamente para destronar al dólar como la divisa de reserva internacional y, simultáneamente, favorecer la internacionalización de la "divisa del pueblo", el renminbi chino.
La información publicada por Wikileaks consiste en un cable procedente de la embajada norteamericana en Beijing y dirigido a la Secretaría de Estado en Washington, D.C., con fecha 28 de abril de 2009. En el documento, se recogen diversas reacciones de la prensa china ante la política internacional norteamericana. Dada la actual situación en el mercado de divisas y del oro, llama especialmente la atención el tercer punto, titulado "RESERVAS DE ORO DE CHINA", en el que se afirma que "China aumenta sus reservas de oro para matar dos pájaros de un tiro."
El texto íntegro del epígrafe en cuestión reza lo siguiente:
El periódico World News Jounal, financiado por China Radio International (Shijie Xinwenbao) (28 de abril): Según la Administración Nacional China para el Mercado de Divisas, las reservas de oro de China han aumentado recientemente. Actualmente, la mayoría de sus reservas de oro se encuentran en Estados Unidos y países Europeos. EEUU y Europa siempre han contenido el aumento del precio del oro. Pretenden debilitar la función del oro como divisa de reserva internacional. No quieren ver que otros países se decanten por las reservas de oro en vez del dólar americano o el euro.
Por lo tanto, contener el precio del oro es muy beneficioso para EEUU para mantener el papel del dólar americano como divisa de reserva internacional. De este modo, el aumento de las reservas de oro de China sirven de modelo y abren el camino para que otros países aumenten sus reservas de oro. Unas reservas de oro grandes también son beneficiosas para la internacionalización del renminbi.
El aumento de las reservas chinas
Durante las últimas décadas del siglo XX, la República Popular China mantuvo sus reservas de oro ligeramente por debajo de las 400 toneladas. En el año 2001, las aumentó a 500. Y al cabo de dos años, añadió otro centenar de toneladas. A finales de 2008, entró en el selecto grupo de países cuyas reservas superan las mil toneladas, junto a Suiza, Francia, Italia, Alemania y Estados Unidos.
Sin embargo, a pesar de sus esfuerzos, las 1.161,6 toneladas chinas no llegan ni a la mitad de las de Francia (2.683,8) y palidecen frente a las casi nueve mil de los Estados Unidos.
Aspiraciones orientales
Las aspiraciones chinas de que su renminbi destrone al dólar americano son compartidas en la región. En abril, el People’s Daily China publicaba unas declaraciones del ministro de finanzas de Malasia, Lim Siang Chai, en las que afirmaba: "Una divisa unificada en Asia, donde la mayoría de países son economías emergentes que podrían fácilmente atraer entradas de dinero caliente procedente de las naciones industrializadas, podría ayudar a disminuir el riesgo de las fluctuaciones de los tipos de cambio y ayudar a promover el comercio de la región". Y añadió: "Sin el liderazgo de China, es difícil que Asia alcance el objetivo de tener una moneda única".
Otro de los frentes abiertos por Beijing ha sido el de prescindir del dólar en sus relaciones con Rusia con vistas a crear una moneda alternativa. Poco después, el presidente ruso, Dimitry Medvedev, mostró "la nueva moneda mundial" en su solapa en la cumbre del G8. Incluso la ONU se sumó a la idea, así como el FMI.
En mayo, el Moscow Times, afirmaba que "la apuesta por el oro da resultado a medida que el dólar se tambalea". Recordaba así la recomendación que Vladimir Putin hizo hace un lustro al banco central y a sus conciudadanos: "La población rusa podría encontrar en el oro una inversión alternativa al dólar y al euro".
La sorpresa llegó cuando el mismísimo secretario del Tesoro de EE.UU., Timothy Geithner, afirmó estar "muy abierto", a la propuesta sino-rusa. Pero, a medida que sigue aumentando el precio del oro al ritmo que decae la confianza en las divisas internacionales, las noticias sobre posibles alternativas se suceden.
Gadafi y el retorno del dinar de oro
Precisamente, ha sido un medio controlado por el Kremlin y, por lo tanto, descaradamente crítico con Washington, el que ha sugerido que la intención de crear una moneda supranacional basada en oro para "enterrar el pavo americano" podría ser la verdadera causa de la intervención occidental en Libia.
El Coronel Gadafi, según RT, estaba poniendo en marcha un plan para el retorno del dinar de oro, "una moneda única africana hecha de oro". RT entrevistó al Dr. James Thring, activista antibelicista, que declaró: "Es una de esas cosas que tienes que planear casi en secreto. Porque, tan pronto como dices que vas a cambiar del dólar a otra cosa, vas a convertirte en un objetivo. Hubo dos conferencias sobre esto, una en 1996 y otra en el año 2000, llamada la Conferencia Mundial de Mutaba, organizada por Gadafi. Y todos estaban interesados, creo que la mayoría de países africanos eran favorables. "
Según RT, "Gadafi no desistió, en los meses previos a la intervención, llamó a las naciones africanas y musulmanas a unirse para crear esta nueva moneda que rivalizaría con el dólar y el euro. Venderían petróleo y otros recursos en todo el mundo sólo a cambio de dinares de oro. Es una idea que alteraría el equilibrio económico del mundo. La riqueza de los países dependería de cuanto oro poseen, no cuantos dólares intercambian. Y Libia tiene 144 toneladas de oro".
"Si Gadafi tenía la intención de intentar poner el precio de su petróleo, o de cualquier otra cosa que el país vendiese en los mercados internacionales, y aceptar alguna otra cosa como divisa, o tal vez, poner en marcha una divisa de dinar de oro; cualquier movimiento de ese tipo, ciertamente no sería bien visto por la élite de poder que hoy en día controla los bancos centrales. Así que, sí, eso ciertamente sería algo que causaría su inmediato rechazo y la necesidad de sacar otros motivos para quitarle del poder".