El ex ministro de Sanidad y ex presidente de Renfe, Julián García Valverde, ha logrado a través de su empresa Imathia en el último año contratos por valor de 21 millones de euros. Además, ha conseguido entrar en el reparto final de adjudicaciones que el Ministerio de Fomento, regido por José Blanco, está haciendo antes de las elecciones del 20-N.
La crisis económica no ha afectado a los negocios de García Valverde, tal como vemos en la evolución de la facturación de la constructora Imathia, que él posee y que reactivó en 2006. En ese mismo año, el ex ministro fue absuelto por falta de pruebas del delito de cohecho en el escándalo de las comisiones del AVE.
El Ministerio de Fomento ha adjudicado a la unión temporal de empresas (UTE) -en la que participa Imathia con un 9%- 91 millones de euros para construir el segundo tramo de plataforma del AVE a Galicia. Por ello, la empresa de García Valverde ingresará ocho millones de euros: una cifra equivalente a todos los ingresos que obtuvo esta misma constructora en 2010.
Según informa El Mundo, este logro se une al conseguido el pasado año para la plataforma del AVE en el tramo Antequera-Granada y que logró la empresa francesa Eiffage en asociación con García Valverde. En total, se llevaron, ambos al 50%, un contrato de 27,3 millones de euros, aunque los ingresos no están reflejados en el último ejercicio presupuestario de Imathia –correspondiente a 2010-.
Una máquina de hacer dinero
En 2003, los ingresos netos anuales de Imathia eran de 1,1 millones. Tres años después, la empresa superó los cuatro y, en 2010, la empresa de García Valverde superó los nueve millones de euros.
Desde que la Audiencia de Madrid absolviera al ex ministro, el socialista ha dado un verdadero impulso a sus negocios. Además, García Valverde consiguió entrar en el consorcio que lidera RENFE para construir el ‘Ave de los peregrinos a La Meca’, una línea de alta velocidad que Arabia Saudí está a punto de adjudicar al consorcio español por 7.000 millones de euros.
Implicado en un escándalo de corrupción
En enero de 1992, García Valverde fue acusado de participar en un escándalo de especulación inmobiliaria en la construcción de la línea del AVE Madrid-Sevilla, mientras era presidente de RENFE entre 1985 y 1991.
El magistrado Jesús Fernández Entralgo, que juzgó durante más de un año el caso, bautizó al proceso como "el juicio de Vivaldi, porque va a durar las cuatro estaciones".
En el proceso estaban imputados, además de García Valverde, la ex responsable de finanzas del PSOE, Aída Álvarez, algunos ex diputados socialistas y varios ex directivos de RENFE y Siemens.
En 2006, García Valverde fue absuelto en el proceso por falta de pruebas, al igual que el que fuera director de compras de Renfe, Leopoldo Iglesias Lachica.