El Financial Times da por hecho que el débil crecimiento económico, el gasto excesivo por parte de los gobiernos autonómicos y el "impulso" de relajar las medidas de austeridad antes de las elecciones generales el 20 de noviembre "ya han descarrilado" el programa de consolidación fiscal de España, uno de los más ambiciosos de Europa.
El rotativo británico lleva en la portada de su edición europea un artículo firmado por Victor Mallet en el que concluye que es "casi imposible" que España cierre 2011 con un déficit público del 6%, un juicio en el que coinciden diferentes expertos y analistas económicos, pero también fuentes del Gobierno. No obstante, recalca que no existe consenso en cuanto al volumen de la desviación de los objetivos, ni en si este objetivo influirá en los inversores internacionales y nacionales, que ya esperaban "malas noticias".
El artículo recuerda que la vicepresidenta económica, Elena Salgado, sigue reafirmando que cumplirá los objetivos oficiales, que implican reducir el déficit al 6% este año y al 4,4% en 2012, tal y como hicieron en 2010, pasando del 11,1% al 9,2%, frente al escepticismo internacional.
Un 6,5% sería "preocupante"
Sin embargo, el Financial Times afirma que "en privado" el Ejecutivo "acepta" que la meta será difícil de alcanzar ahora que la economía se "tambalea" al borde de una nueva recesión, con un crecimiento que es "muy poco probable" que alcance la predicción gubernamental 1,3% en 2011. Así, el diario cita a un "funcionario de alto nivel" que asegura que es difícil cumplir el objetivo, y considera que si la cifra de déficit queda por encima del 6,5% "sería preocupante".
También está aumentando el coste de la recapitalización de las cajas de ahorro, si bien parte de la presión sobre el erario público va a ser desviada con la "polémica decisión" de fusionar los tres fondos de garantía de depósitos en uno solo que se utilizarán también para este fin.
Se ignoran los planes del PP
Por su parte, el economista Edward Hugh estima que el exceso de déficit podría llegar como mucho hasta el 1,5%. "Antes de convocar las elecciones, tal vez tuvieron la oportunidad, pero hay muy pocos incentivos para un Gobierno que se va, y sabe que se va, para cumplir los objetivos", considera este experto afincado en Barcelona.
Mientras tanto, el PP, que se espera llegar al poder tras las próximas elecciones generales, no ha dado detalles de sus planes presupuestarios, al margen de los ajustes en los gastos de las comunidades autónomas. En cualquier caso, el Financial Times recuerda que los 'populares' ya pactaron con el PSOE la modificación de la Constitución para recoger el principio de estabilidad presupuestaria.