El Gobierno griego adquirirá 400 M1A1 Abrams de segunda mano en los próximos meses. Según ha informado la web DefenceGreece haciéndose eco de una revista especializada en temas de defensa, la operación se habría cerrado en los últimos días y al pedido se le unirían hasta 20 vehículos anfibios AAV7A1.
El coste de la compra no ha sido desvelado, pero teniendo en cuenta operaciones anteriores podría estar algo por encima de los 1.000 millones de euros. Según esta misma información, el intercambio podría incluir solamente la renovación del actual equipamiento del ejército griego o una mejora en su nivel operacional. La primera fase del acuerdo incluirá la entrega de unos 100 tanques.
La noticia no tendría nada de extraño en ningún otro país de la UE, pero sorprende a la luz de las dificultades a las que está haciendo la economía griega en las últimas semanas. Hace unos días se supo que el país incumplirá el objetivo de déficit público para este año (del 7,6% pasará al 8,5%). Por eso, este mismo viernes se ha sabido que el ministro de Finanzas heleno, Evangelos Venizelos, ha acordado con el FMI un paquete de ahorro que le permita mejorar sus expectativas de déficit para el año que viene.
El próximo 24 de octubre, se conocerá el informe del equipo enviado por la troika (Comisión Europea, FMI y BCE), y que será decisivo para determinar si se entrega el siguiente tramo de ayuda al Gobierno heleno. La decisión dependerá de la credibilidad que tengan las medidas puestas en marcha (reducción de salarios, pase a la reserva de funcionarios, etc...). El propio Venizelos ha admitido que "sería catastrófico para el país" que no se renovase este rescate.
Pues bien, en esta situación, sorprende que se haya anunciado la compra de estos 400 tanques. Aunque Grecia mantiene un largo enfrentamiento con Turquía (especialmente por Chipre), no parece probable que vaya a necesitar esos Abrams en los próximos años. Y esos 1.000 millones podrían servir para reducir el déficit.