El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Timothy Geithner, hablará con los ministros de Finanzas europeos de la posibilidad de emplear el Fondo de Rescate europeo (EFSF, en sus siglas en inglés) para avalar al Banco Central Europeo (BCE) en su compra masiva de bonos periféricos.
Geithner, que asiste este viernes a la reunión de ministros de Economía y finanzas de la zona euro (Ecofin) que se celebra en Polonia, sugerirá que el Fondo de 440.000 millones de euros establecido en mayo de 2010 se utilice de forma similar a un fondo de emergencia creado por el Tesoro y la Reserva Federal de EEUU (FED) en 2008 para manejar la crisis de hipotecas 'subprime', según las fuentes consultadas por Reuters.
"Geithner probablemente insistirá en la importancia de apalancar para tener más fondos que protejan a los grandes (países) europeos, Italia y España, y para encontrar una solución para Grecia", añadieron. "El apalancamiento del EFSF creo que es algo que se pondrá en la mesa", señalaron. "Habrá cierta apertura a la propuesta".
Washinton puso en marcha este mecanismo, llamado Term Asset-Backed Securities Loan Facility (TALF), para ayudar a los bancos del país en la crisis de 2007 y 2008. La idea consistía en inyectar hasta 1 billón de dólares en créditos mediante la compra de titulizaciones (deuda bancaria) respaldada por créditos hipotecarios, estudiantiles y de consumo. Por entonces, el mercado interbancario en EEUU estaba congelado. El Tesoro creó un Fondo con dinero procedente del TARP (plan de rescate bancario) para avalar la compra de títulos por parte de la FED.
Bajo el TALF, la FED de Nueva York, donde Geithner fue presidente, prestó inicialmente hasta 200.000 millones de dólares a la banca, aceptando como colateral dichos activos con un determinado descuento, mientras que el Tesoro ofreció a la FED un respaldo de 20.000 millones de dólares para cubrir posibles pérdidas. Es decir, el banco central, con el apoyo de dinero público, compró activos tóxicos (poco líquidos y de alto riesgo) a los bancos comerciales.
Geithner propone ahora que la UE haga algo similar. Puesto que el actual Fondo de rescate europeo, dotado con 440.000 millones de euros, es insuficiente para rescatar a España o Italia, Bruselas podría emplear este dinero para respaldar al BCE -u otra agencia financiera- en su compra de bonos públicos a los bancos. De este modo, el Fondo serviría para recapitalizar a la banca europea.