El presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, y la canciller alemana, Angela Merkel, propusieron este martes la instauración de "un verdadero gobierno económico" en la zona euro, constituido por un consejo de jefes de Estado y de Gobierno que se reúna dos veces al año.
En la presentación de las conclusiones de la reunión mantenida para tratar la reforma de la gobernanza de la zona euro, los dos mandatarios anunciaron su deseo de que el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, asuma la presidencia estable de esa instancia, cuyo mandato duraría dos años y medio.
Asimismo, ambos dirigentes han acordado que los 17 estados miembros adopten en sus respectivas constituciones, antes del verano de 2012, reglas comunes para garantizar el equilibrio presupuestario. También proponen implantar una nueva tasa comunitaria sobre las transacciones financieras.
Para dar ejemplo de convergencia al resto de socios, Alemania y Francia estudiarán diversas medidas de homogeneización fiscal y presupuestaria. Entre ellas, destaca la unificación del Impuesto de Sociedades de ambos países a partir de 2013, así como la elaboración coordinada de los Presupuestos Generales del Estado. Por último, pretenden reformar la orientación de los fondos europeos para reforzar la competitividad de la zona euro.
"El euro es el futuro, es nuestro futuro" y "tiene mucho que ver con nuestra convivencia pacífica", ha dicho Angela Merkel ante Sarkozy.
La primera pregunta de la rueda de prensa ha sido sobre una hipotética creación de eurobonos sobre los que se ha venido especulando en las últimas semanas. Merkel lo ha rechazado tajantemente: en su opinión, "el último recurso son los eurobonos" y espera que la UE "no tenga que depender del último recurso". "Tenemos medios para resolver la crisis ahora. Los eurobonos no nos van a ayudar".
Sarkozy apoyó el rechazo de la canciller. Supondría, recordó, "garantizar la totalidad de la deuda sin tener un control del gasto". "Tal vez algún día hablemos de esto, pero tras un proceso de integración europeo", dijo.