Los españoles se encuentran entre los ciudadanos de la UE que más pagan por el uso normal de una cuenta bancaria, un total de 178 euros, una tarifa media que sólo se supera en Italia (253 euros). El precio medio de una cuenta en la UE es de 111 euros, pero los consumidores búlgaros sólo pagan 27 euros, informa Europa Press.
La Comisión sopesa obligar por ley a las entidades financieras a informar de forma transparente a sus clientes sobre las comisiones que cobran tras fracasar un intento de autorregulación del sector.
"De media hoy un consumidor español paga 178 euros por la utilización normal de una cuenta bancaria. Un consumidor búlgaro paga 27 euros. Sabemos que hay diferencias ligadas al poder adquisitivo pero eso no lo explica todo, ni lo justifica todo", ha dicho este lunes el comisario de Servicios Financieros, Michel Barnier, en rueda de prensa.
"Existen problemas de terminología. Los mismos tipos de gastos no se designan de la misma manera dentro de un mismo país, finalmente los consumidores no saben lo que pagan ni por qué. No pueden comparar las diferentes ofertas en el mercado ni sacar las ventajas normales de una competencia sana", ha denunciado.
El Ejecutivo comunitario ya pidió a los bancos hace un año que desarrollaran, en cooperación con las asociaciones de consumidores, un código de conducta para dar información "estandarizada" y "comprensible" a los clientes sobre comisiones. Pero "la respuesta del sector bancario no está a la altura". "Estoy decepcionado", ha indicado Barnier.
El sector financiero tiene ahora dos meses más, hasta mediados de septiembre, para mejorar su oferta. "Si esta propuesta no está a la altura actuaremos por la vía legislativa para obligar al sector bancario a esta transparencia sobre las comisiones", ha amenazado el comisario de Servicios Financieros.
La Comisión ha pedido además este lunes a los Estados miembros que tomen las medidas necesarias para garantizar que los bancos ofrezcan a todos los ciudadanos una cuenta bancaria básica "a precios asequibles" con independencia de su país de residencia o su situación financiera. Bruselas volverá a evaluar la situación en un año y, si no ve progresos, legislará sobre la materia.
En la actualidad, 30 millones de consumidores de la UE mayores de 18 años no tiene cuenta en un banco. De ellos, se calcula que entre 6 y 7 millones se encuentran en tal situación porque la institución financiera a la que se han dirigido ha rechazado su solicitud.