IKEA fue creada hace más de seis décadas en los bosques del sur de Suecia y hoy está presente en 40 países del mundo. Este gigante comercial llegó a España casi una década después de llegar a nuestros vecinos europeos. En 1996 se abrió la primera tienda IKEA en Badalona. La tradición española en cuanto al consumo de muebles se refiere distaba mucho de la oferta que IKEA mostraba.
No obstante, la compañía sueca poco a poco ha ganado terreno a los vendedores al por menor tradicionales. El sector está pasando por un momento difícil y Mikael Ohlsson, su consejero delegado, aseguraba este lunes en una entrevista en The Wall Street Journal que "el mueble español y el mercado nacional al por menor ha reducido su facturación de 18.000 millones de euros a cerca de 10.000 de euros". Sin embargo, la cuota de mercado del gigante sueco creció un 5%.
El grupo IKEA logró unos beneficios durante el ejercicio 2009-2010 de 2.700 millones de euros, incrementando un 6,1% sus beneficios de los que parte se reinvierten en otras tiendas. De hecho, Ohlsson aseguró que a pesar de la caída en la demanda, del incremento del paro y de las malas perspectivas económicas, su intención es construir en España un total de 10 nuevas superficies, un gasto que Ohlsson dice que podría crear 20.000 puestos de trabajo y traer miles de millones en nuevas inversiones.
El problema surge cuando la compañía se enfrenta a las estrictas regulaciones de algunas zonas en España que ralentizan la apertura de estas 10 tiendas que ayudarían a la crítica situación española aliviando la cifra de paro.
Mikael Ohlsson afirmó al medio de comunicación estadounidense, que la apertura de estas tiendas, aunque no sería rentable a corto plazo, sí podría serlo en el largo plazo porque confía en la recuperación de la economía hispana. La multinacional tiene claro los lugares donde estas tiendas estarían ubicadas, serían dos en Valencia, una en Madrid y reubicaciones en Granada y Sevilla. "Podríamos ponerlo en marcha mañana. Contribuyendo así a la economía española y crear puestos de trabajo y contratos de construcción. El país lo necesita y estamos dispuestos a hacerlo" añadió Ohlsson, pero la realidad es que todavía tardarán "al menos cinco años" es seguir adelante con este programa debido a los reglamentos de apertura de nuevos centros comerciales españoles.
Obstáculos similares suceden en el Reino Unido donde la compañía sueca quiere abrir otras tres tiendas pero, "las reglas son las reglas", dice Ohlsson. En Ikea confían en que aunque el paro se ha disparado en España y la situación es muy crítica "la necesidad de tener una casa bonita permanece". Además, su cuota de mercado aumentó en un 5% el año pasado y esperan que esa tendencia continúe. El empresario asegura que no está demasiado preocupado por los precios de las materias primas, y añadió que su compañía continuará bajando los precios este año y el próximo.