Según fuentes sindicales consultadas por EFE la dirección de Sharp ha comunicado a los trabajadores en una reunión de esta mañana que el ERE afectará a dos tercios de la plantilla, una vez cerrada ayer la venta de los activos industriales a la compañía catalana Cirsa.
Sharp, por su parte, mantendrá los 40 empleados del área de investigación y desarrollo y sesenta trabajadores del área comercial, con la intención de no retirarse absolutamente de España. La intención de la empresa es proponer al Departamento de Empresa y Empleo un ERE inicial de extinción que afecte a unos 200 empleados, pero con la idea de que finalmente sólo cien sean los afectados.
Los cien restantes serían absorbidos por la compradora de la planta productiva, Cirsa, y reconvertirían sus tareas para dedicarse a la fabricación de máquinas de juego. La multinacional Sharp abandonará la producción en España tras llegar ayer a un acuerdo con Nortia, propietaria de Cirsa, para vender sus activos industriales de la planta de Sant Cugat del Vallés.
Sharp confirmó la transmisión de sus activos industriales a la corporación Nortia, que asumirá la instalación industrial en Sant Cugat para realizar en ella parte de su proceso de fabricación de máquinas de juego. Así, la multinacional nipona dejará de producir televisores de led el próximo mes de setiembre.
En un comunicado, Sharp España detalló que el acuerdo alcanzado se ha comunicado al presidente de la Generalitat, Artur Mas, ante el cual la empresa se compromete "a mantener una estructura estratégica de ingeniería". El área de investigación y desarrollo que mantendrá a Sharp vinculada con España desarrollará tanto actividades relacionadas con la industria del juego como con el mercado europeo de los televisores.
Sharp era la última fábrica de electrónica de consumo que se mantenía en el eje industrial catalán, ocupa a 300 empleados y ha sufrido en los últimos años tres ERE temporales, el último de los cuáles está vigente hasta el 30 de septiembre. a marcha de la nipona coincide con la partida de otras compañías japonesas de Cataluña, como Sony o Yamaha.