Los grupos acampados en la Puerta del Sol van, poco a poco, desgranando sus propuestas. Este jueves se están celebrando varias asambleas que pretenden sacar adelante un programa alternativo de 24 puntos, en el que se entremezclan propuestas políticas, sociales, económicas e, incluso, sobre la forma del Estado. La base de la que salen estas propuestas son los manifiestos incluidos en democraciarealya.es y nolesvotes.com.
La primera de estas webs es una página cercana a la izquierda, que mezcla reivindicaciones políticas sobre las reglas del juego (ley electoral, control sobre los políticos, etc.) con propuestas clásicas de la izquierda en temas sociales y económicos (más impuestos, expropiaciones de viviendas vacías, incremento del salario mínimo, etc.). En el aspecto político, se une el manifiesto de nolesvotes.com que reclama un cambio en el sistema electoral para garantizar la presencia de partidos minoritarios, la separación de poderes y el control de los partidos.
Propuestas políticas: cambio en la Ley Electoral
Este mismo jueves, a mediodía, han dado a conocer los primeros acuerdos de la asamblea. Para empezar, han comenzado por la cuestión política, quizás la menos polémica, porque al ser una petición sobre las reglas del juego podría gustar a un amplio sector de la población. Defender un cambio en la Ley Electoral, la supervisión de los ingresos de los partidos políticos o una separación de poderes efectivas no tiene nada que ver con izquierdas o derechas.
En este sentido, lo aprobado al mediodía del jueves en Sol es muy similar a lo que defienden los partidos liberales españoles desde hace años: cambio en el ley electoral, más control sobre los representantes políticos, reducción de los privilegios de los cargos electos y supervisión de la financiación de partidos y administraciones públicas. Entre las propuestas, están una recogida de firmas para que el voto en blanco sea computable, ley de responsabilidad política (para que no haya imputados en las listas), someter más leyes a referéndum, control sobre los sueldos de los políticos, eliminación de los privilegios y pensiones vitalicias para diputados y senadores.
Las medidas económicas: izquierda anticapitalista
Sin embargo, todo esto cambia cuando se llega a las propuestas económicas, que son las clásicas reivindicaciones de la extrema izquierda anticapitalista (entre los grandes partidos, sólo IU lleva en su programa planteamientos similares). Es extraño que quienes dicen desconfiar de los políticos, de los partidos, del sistema corrupto o de la evolución de la democracia en los últimos años, sean los mismos que cuando llegan al campo económico hagan propuestas que se dirigen a pedir más poder para los políticos (más impuestos, expropiaciones de pisos, más dinero y menos capacidad de elección en la educación pública, dirigismo empresarial y laboral, etc...)
De esta manera, ya han empezado a consensuar una serie de medidas económicas muy concretas para solventar la crisis en España que, en teoría, se ofrecen como una alternativa a los programas electorales de los tradicionales partidos políticos con representación parlamentaria.
Sin embargo, es preciso enfatizar el "teórico" espíritu alternativo de dicho movimiento. Y es que, el análisis de tales propuestas arroja como resultado una curiosa coincidencia: los indignados de Sol apuestan por implantar en España el recetario económico que defiende IU de cara a las elecciones autonómicas y locales del próximo 22 de mayo.
Así, al menos lo corrobora la web elecciones.es, una herramienta que permite conocer al potencial elector indeciso qué partido comulga más con sus ideas políticas, tras contestar a una serie de preguntas, en base al contenido programático de cada partido.
Libre Mercado ha hecho la prueba. Y tras responder a las cuestiones de ámbito económico en base al ideario consensuado por Democracia Real Ya el resultado no deja lugar a dudas: los integrantes de este movimiento comulgan con el programa de IU, de tinte claramente pro comunista.
Curiosamente, la persona de contacto que aparece en los registradores web del dominio democraciarealya.es es Manuel Jesús Román Estrade, un bloguero de izquierdas que ha sido editor de Barrapunto, el primer blog colectivo importante de España. Asimismo, es uno de los principales dirigentes de Izquierda Andaluza, partido por el que fue cabeza de lista al Parlamento andaluz en 2000 por Huelva.
Esta formación política, escisión de Izquierda Unida en Andalucía, ha concurrido en diferentes elecciones en coalición con otras formaciones andaluzas de izquierda, como Los Verdes, el Partido Socialista de Andalucía o Coalición Andalucista.
De hecho, el líder de IU, Cayo Lara, ha reconocido que su hija acampó en la noche del miércoles en la Puerta del Sol junto a los jóvenes que desde el domingo se llevan manifestando en Madrid. El coordinador federal de este partido está, además, encantado con la acampada de Sol, y dice que sus reivindicaciones coinciden con las su partido.
Pero, ¿qué defienden en concreto estos manifestantes? A continuación, sus principales propuestas económicas:
1. Desempleo
- Reparto del trabajo fomentando las reducciones de jornada y la conciliación laboral hasta acabar con el desempleo estructural (es decir, hasta que el desempleo descienda por debajo del 5%).
- Jubilación a los 65 y ningún aumento de la edad de jubilación hasta acabar con el desempleo juvenil.
- Bonificaciones para aquellas empresas con menos de un 10% de contratación temporal.
- Seguridad en el empleo: imposibilidad de despidos colectivos o por causas objetivas en las grandes empresas mientras haya beneficios, fiscalización a las grandes empresas para asegurar que no cubren con trabajadores temporales empleos que podrían ser fijos.
- Restablecimiento del subsidio de 426€ para todos los parados de larga duración.
2. Vivienda
- Expropiación por el Estado de las viviendas construidas en stock que no se han vendido para colocarlas en el mercado en régimen de alquiler protegido.
- Ayudas al alquiler para jóvenes y todas aquellas personas de bajos recursos.
- Que se permita la dación en pago de las viviendas para cancelar las hipotecas.
3. Servicios públicos
- Supresión de gastos inútiles en las Administraciones Públicas y establecimiento de un control independiente de presupuestos y gastos.
- Contratación de personal sanitario (público) hasta acabar con las listas de espera.
- Contratación de profesorado (público) para garantizar la ratio de alumnos por aula, los grupos de desdoble y los grupos de apoyo.
- Reducción del coste de matrícula en toda la educación universitaria (pública), equiparando el precio de los posgrados al de los grados.
- Financiación pública de la investigación para garantizar su independencia.
- Recursos sociales locales: aplicación efectiva de la Ley de Dependencia, redes de cuidadores locales municipales, servicios locales de mediación y tutelaje.
4. Banca
- Prohibición de cualquier tipo de rescate o inyección de capital a entidades bancarias: aquellas entidades en dificultades deben quebrar o ser nacionalizadas para constituir una banca pública bajo control social.
- Elevación de los impuestos a la banca de manera directamente proporcional al gasto social ocasionado por la crisis generada por su mala gestión.
- Devolución a las arcas públicas por parte de los bancos de todo capital público aportado.
5. Fiscalidad
- Aumento del tipo impositivo a las grandes fortunas y entidades bancarias.
- Eliminación de las SICAV.
- Recuperación del Impuesto sobre el Patrimonio.
- Control real y efectivo del fraude fiscal y de la fuga de capitales a paraísos fiscales.
- Promoción a nivel internacional de la adopción de una tasa a las transacciones internacionales (tasa Tobin).
- Reducción drástica del gasto militar.
En resumen, poco cambia el recetario de los indignados con el de IU. Como resultado, el calificativo de "antisistema" no sería, por tanto, el más idóneo para definir a este grupo de manifestantes, ya que IU es un partido totalmente integrado en actual sistema político.
Además, su principal mensaje resulta contradictorio. No obstante, exigen restar poder a la actual clase política a favor de los ciudadanos, pero la implantación de sus medidas económicas arrojaría justo el resultado contrario: más Estado, es decir, más poder político.