Bernard von NotHouse, de 67 años, el creador de una moneda alternativa en EEUU basada en oro y plata, bajo el nombre de "Liberty Dollars", ha sido declarado culpable por falsificación y puede ser sentenciado a un máximo de 15 años de cárcel y una multa de hasta 250.000 dólares. El juicio duró apenas ocho días y el jurado lo declaró culpable tras deliberar una hora y media. NotHouse está ahora a la espera de condena definitiva.
Los "Liberty Dollars" aparecieron por primera vez en 1998, cuando von NotHouse las creó como una alternativa anti-inflacionaria a los dólares emitidos por la Reserva Federal. Consisten en medallones de oro, plata y también de cobre para las denominaciones más bajas. También emitieron certificados de plata con reserva del 100%.
No son la única moneda alternativa que existe en el país norteamericano, aunque sí es la única de oro y plata, y había conseguido una fuerte aceptación. La adopción de esta moneda por parte de los particulares fue muy paulatina, pero poco a poco había ido tomando relevancia, hasta el punto de alcanzar una circulación por valor de 7 millones de dólares.
El veredicto concluye una investigación iniciada en 2005 por el Gobierno federal de EEUU. En noviembre de 2007, los federales asaltaron la sede de la organización, situada en el estado de Carolina del Norte, llevándose consigo documentos y todas las monedas que encontraron, incluidas dos toneladas con la cara del congresista Ron Paul.
El asalto fue consecuencia de la denuncia que NotHouse presentó en marzo 2007 -pocos meses antes- contra el Gobierno estadounidense para que dejara de referirse a los "Liberty Dollars" como una moneda ilegal, así como para forzar la retirada de un aviso colgado en la web de la Casa de la Moneda en donde se afirmaba que NotHouse violaba la ley federal.
Según el Gobierno, los "Liberty Dollars" tienen la intención de confundirse con los dólares oficiales emitidos en régimen de monopolio por la Reserva Federal (FED), ya que también están marcados con el signo del dólar y usa la palabras "dollar", "USA", "Liberty" y "Trust in God" (Confía en Dios) a diferencia del "In God We Trust" ("En Dios Confiamos"), así como otras características de la moneda oficial del Gobierno.
La similitud o no de ambas monedas se puede comprobar en esta imagen, donde se compara los billetes de 5 dólares del Gobierno federal con los "Liberty Dollars".
La palabra dólar, originalmente, es una medida de peso. En concreto, se refería a la cantidad de oro o plata que había en una determinada moneda, al igual que los términos peseta o libra. Este término también se emplea en numerosos países de todo el mundo para referirse a las monedas emitidas por sus gobiernos, como por ejemplo Canadá, Zimbawe, Australia o Hong Kong, entre otros.
Los creadores de esta moneda alternativa eran conscientes de lo agresivos que llegan a ser los gobiernos a la hora de mantener el monopolio de la moneda, así que habían consultado a varias personas de la Administración federal. Según la organización, Claudia Dickens, portavoz del Bureau of Engraving and Printing del Tesoro estadounidense, encargado de la emisión de los dólares de la Reserva Federal, les confirmó previamente que los "Liberty Dollars" eran legítimos:
Mientras no digan 'moneda de curso legal' no hay ningún problema.
La mencionada denuncia de 2007 fue una reacción al aviso emitido en 2006 por la Casa de la Moneda del Gobierno federal en donde, además de acusar a esta organización de falsificar dólares, se afirmaba que competir contra el monopolio oficial en la emisión de moneda constituía un acto criminal. La primera reacción de la organización ante tales acusaciones fue emitir una nota en la que se afirmaba lo siguiente:
Los Liberty Dollars no son moneda de curso legal, nunca se ha afirmado tal cosa, y no pretende serlo.
Sin embargo, Bernard von NotHouse no escondió nunca su intención de introducir competencia en el mercado de la moneda en EEUU. Cuando inició su proyecto comentó a uno de los periodistas:
Vamos a ser a la Reserva Federal lo que Federal Express ha sido al servicio postal del Gobierno.
A pesar de todo, el Gobierno estadounidense siguió adelante con la denuncia y ha conseguido una sentencia de culpabilidad por los cargos de intentar falsificar dólares oficiales, lo cual les ha permitido intentar confiscar todos los "Liberty Dollars" en circulación. Tras la sentencia, el abogado que representa a Washington en el proceso ha llegado a tildar de terrorista a NotHouse y, de paso, ha lanzado un aviso para navegantes:
Es una violación de la ley federal [...] crear una moneda privada para intentar competir con el sistema monetario oficial de los Estados Unidos.
Cualquier intento de socavar la moneda legítima de este país es, sencillamente, una forma de terrorismo doméstico. Aunque estas actividades anti-gubernamentales no son violentas, son igual de insidiosas y representan un claro peligro para la estabilidad económica de este país.
Estamos totalmente resueltos a parar estas iniciativas mediante infiltración, asalto y cierre de cualquier organización que amenace a nuestra forma de gobierno democrático.
Curiosamente, la delegación de Cleveland de la Reserva Federal, el organismo encargado de gestionar el monopolio de la moneda impuesto por el Gobierno estadounidense, ha emitido informes donde afirma que este tipo de monedas privadas han ayudado a la economía en el pasado, especialmente durante la Gran Depresión.
Además, varios estados de EEUU, como Utah, están presentando iniciativas para empezar a emitir monedas de oro y plata como alternativa al dólar oficial. De hecho, EEUU tiene una larga tradición de monedas privadas, aunque la imposición de un monopolio monetario siempre ha sido una aspiración de todos los gobiernos en la historia porque permite a los dirigentes financiarse mediante la inflación, que es mucho más discreto y alejado del control ciudadano que los impuestos directos, por razones obvias.
Por ejemplo, durante los siglos XVIII y XIX las monedas privadas eran la norma y los ciudadanos lucharon para eliminar los dos bancos centrales que se intentaron crear en aquella época.